PortadaEditorialVideotecaAudiotecaLiteraturaCorosPEDEAEContacto

Culturales en Bromatología


El 26 de noviembre cerraron los talleres Puente Cultural Saludable de la Secretaría de Extensión de la Facultad de Bromatología.

La muestra Anual Taller de Teatro El Puente presentará la obra “Nada del amor me produce envidia”. En este camino, la idea es que a lo largo de estos seis meses de encuentros, los talleristas hayan cumplido, de alguna manera, con esa motivación primera que los llevó a inscribirse.

“Un taller de teatro no es un taller de formación actoral, sino que las personas se acercan por distintos motivos”, había expresado la profesora y productora de Teatro Sonia Luján, en uno de los diálogos con FBNoticias.

“Trabajamos sobre las limitaciones que cada uno pueda tener para desarrollarse en su vida social. Hacemos hincapié en logros y abordamos dificultades a partir de las diferentes propuestas y de herramientas como el cuerpo, la voz y emociones a través de juegos teatrales, desinhibiciones e improvisaciones”, explicó, a la vez que destacó la importancia de ser perseverante”.

Sobre esta interesante experiencia, Alicia García, secretaria de Extensión y Cultura, manifestó: “Estamos muy entusiasmados en mostrar lo que hemos logrado con los talleres. Se ha destacado el trabajo de las talleristas y de los grupos formados. Invitamos a participar a toda la comunidad universitaria”.

El cuerpo se expresa
La muestra Anual del Taller de Expresión Corporal concretará la presentación  “Puente Mágico, el lugar de los cuerpos poéticos”. El espacio a cargo de Josefina Basaldúa, estuvo dirigido a cualquier persona, sin necesidad de que estas cuenten con experiencia previa en la actividad. “Está dentro de un marco que tiene que ver con la salud”, indicó Josefina.

La dinámica de la iniciativa se apoyó en tres ejes. En una primera etapa, entrenamiento corporal de registro y reconocimiento del cuerpo -técnicas de yoga y pilates-. A este proceso, con el paso de los meses se sumaron juegos teatrales no verbales y relajación pasiva.

“Se apunta a que cada alumno pueda reconocer su cuerpo y potenciar las herramientas de la expresividad de su cuerpo. Recuperar esa habilidad para luego potenciarla y llevarla a lo artístico”, hizo saber, y explicó que “subyace el concepto de que cada uno es un ser único e irrepetible, por ello cada uno de los asistentes tiene una forma y un modo de expresarse que es necesario respetar. Esto genera un clima de confianza”, consideró.

Fuente: Periódico Digital - Facultad de Bromatología