El domingo 17 del corriente terminó el 3º Encuentro de Poesía de Arroyo Leyes. La convocatoria contó con poetas de distintas provincias argentinas dando una clara muestra del interés que despierta esta disciplina.
Compartimos una reseña de Patricio Torne y algunas fotografías que testimonian la jornada poética.
Tenemos Festival
1 Confirmado, cuando el frío es arrasador, la poesía motiva, pero no calienta.
2 Siempre lo mejor pasa en un Festival de Poesía, y más si somos testigos presenciales.
3 Me reencontré, después de muchos años, con el poeta entrerriano Hugo Luna, y descubrí que era mucho más alto que yo. Tipo querible y necesario.
4 Pude comprobar que Marita Balla, donde hay aire, ella siempre es un pulmón.
5 Conocer a los poetas personalmente no es lo mismo que leerlos. Me encantó conocer a Valeria Pariso y Celeste Dieguez, y confirmar que además de buenas poetas, son un encanto de personas.
6 Maximiliano Spreaf es sensible, y me hizo emocionar con una mala lectura de un poema extraordinario.
7 Con Wachi Molina uno puede prescindir de Pedro Lemebel, y encima de hacer muy buena poesía performatica, te divertís y te sentís cobijado por su inteligencia.
9 Cada vez que Franco Rivero lee “catecismo” me resulta inevitable disimular el llanto.
10 Donde está Alejandra Alejandra Mendez Bujonok te sentís en familia.
11 En mis tiempos mozos, la bebida recurrente para los versos era la ginebra, el vino. Ahora, en los poetas jóvenes, hay exceso de cerveza (en los versos, se entiende)
12 La pareja de La Plata “Planeta Viandas” que hacen, según su propia definición, poesía sonora, no pueden más de tiernos y abrazables.
13 Adriana Borga leyó unos poemas inéditos estremecedores.
14 Ferny Kosiak es la marca en el orillo de todo encuentro que se precie de artístico.
15 Washington Atencio Andrioli es el ojo atento y sensible que se necesita para registrar cualquier encuentro que trate de poesía.
16 El recuerdo amoroso de Inés Manzano no faltó ni faltará nunca.
17 Ariel Aguirre leyó un poema donde hay fuego, y me encendió el corazón.
18 La delegación de Villa Mercedes (Juan Luna y Darío Dario Miranda), sin alardes de ningún tipo, ya puede jugar en las ligas mayores.
1 9 El Camino de La Costa, no sólo tiene poesía, Tiene La Vuelta del Pirata, y allí se come el mejor pescado del mundo.
20 Con Pablo, sin exagerar, la pasamos maravillosamente bien.
21 En lugares como Rincón, Arroyo leyes, siempre podés volver a comer las naranjas de la infancia, esas bien ricas con gusto a naranjas.
22 En la feria de libros, conseguí joyas maravillosas, entre otras, los libros que edita Fabián Leppez con su LA RONRONERA editora.
23 Gracias por todo esto, y lo que me olvido de señalar que es mucho
24 Todo esto se lo debemos a Alejandra Pipi Bosch y los que hicieron posible el Festival.
Patricio Emilio Torne nació en Helvecia, provincia de Santa Fe. En 1983 se radicó en Córdoba, donde junto a otros colegas fundó la Subcomisión Juvenil de Escritores de la SADE. Desde 1985 reside en Villa Mercedes, San Luis, donde dirige los Talleres Literarios de la Facultad de Ingeniería.
En la misma Facultad, desde su fundación en 1990 hasta el cierre en 2014, fue director de Radio FM La Zona, una experiencia de comunicación alternativa y comunitaria, un polo de desarrollo cultural, en un marco de solidaridad y militancia social.
La continuidad de esta experiencia se dio durante dos años más en La otra FM de la que fue cofundador junto a un grupo de oyentes de La Zona. Actualmente es coordinador del área de Cultura y Artística de la Facultad.
Su libros editados son: Órbita de Endriago (1988), Helvecia y otros tópicos (1989), Donde Muere la Lógica (1992), Anacrónica (2000), Perros (2010), Materialismo Dialéctico y Perros y más perros (2013), Frenesí (2017) y Capital Simbólico (2017).
Publicado 18/06/18